TAPA DEL DÍA La ciudad de Pergamino vive un momento crítico para sus panaderías. Desde el 1 de abril, el precio del kilo de pan aumentó un 12%, pasando a rondar entre $2.500 y $3.300, como consecuencia del encarecimiento de los costos de producción. La harina, las materias primas, los combustibles y los servicios se dispararon, dejando al sector al borde del colapso. “El costo de producción se fue por las nubes”, afirmaron panaderos locales consultados por TAPA DEL DÍA. En las panaderías de Pergamino, la ganancia neta apenas alcanza entre el 9% y el 12%, un margen mínimo comparado con el 40% de otros tiempos, cuando se podía invertir en mejoras o maquinaria. “Hoy trabajás para sobrevivir al próximo mes”, lamentaron fuentes del sector. A pesar de los esfuerzos por mantener los precios de semanas atrás, la caída en las ventas y el aumento de los insumos hacen que la situación sea cada vez más difícil de sostener. TAPA DEL DÍA “Hace un año que no tocábamos los precios, pero ya no hay salida. Queremos evitar cierres y proteger los puestos de trabajo”, explicaron panaderos de Pergamino. La crisis, que golpea fuerte en esta ciudad, refleja un problema mayor en la industria panadera argentina, pero aquí el impacto se siente con crudeza: si los costos no se estabilizan, muchas panaderías podrían desaparecer.