Un homenaje a la vocación que trasciende el tiempo El pasado sábado por la noche, el cuartel de Bomberos Voluntarios de Pergamino fue escenario de una ceremonia profundamente emotiva. Allí se reconoció al Suboficial Mayor Eduardo Casenave, quien cumplió 25 años de servicio ininterrumpido al cuerpo y a toda la comunidad pergaminense. Durante estos años, Casenave fue mucho más que un bombero. Fue escucha, presencia, ejemplo y motor silencioso de una vocación que no se apaga. Cada incendio combatido, cada emergencia atendida, cada madrugada interrumpida hablan de un compromiso inquebrantable, el que se forja con corazón y con fuego interno. “Gracias, Eduardo, por tu dedicación diaria, contamos con vos por muchos años más”, expresó el cuerpo activo de Bomberos Voluntarios, reconociendo que este homenaje no marca una despedida, sino un nuevo capítulo en una trayectoria que sigue en plena actividad. Desde TAPA DEL DÍA acompañamos este reconocimiento y destacamos la figura de Eduardo como símbolo del verdadero espíritu del voluntariado. Un referente humano y profesional La historia de Eduardo Casenave es también la historia de los valores que sostienen a una comunidad: el sacrificio, la pasión, la humildad y la entrega. Desde sus inicios, supo ganarse el respeto de sus compañeros y el cariño de cada vecino que alguna vez necesitó del auxilio del cuartel. “Eduardo es familia, es historia viva de esta institución”, comentó uno de los presentes en la ceremonia. Y no es para menos: en cada salida, en cada guardia, en cada gesto solidario, Casenave fue sembrando una marca imborrable que hoy se celebra con orgullo. Este tipo de reconocimientos no solo honran una labor personal, sino que reafirman la importancia de fortalecer nuestras instituciones comunitarias, sosteniendo el valor de quienes las integran. Desde la redacción de TAPA DEL DÍA, felicitamos a Eduardo Casenave por su entrega incansable y por ser un verdadero ejemplo para las nuevas generaciones.