Mercado Pago se convierte en banco: la fintech de Mercado Libre da el salto más ambicioso de su historia Redacción del Diario Tapa Del Día – La billetera virtual Mercado Pago, insignia tecnológica de Mercado Libre, comenzó oficialmente el proceso para convertirse en banco en la Argentina. La maniobra, sin precedentes entre las fintech del país, afectará directamente a más de 25 millones de usuarios y redefinirá el mapa financiero nacional. A diferencia de otros jugadores del ecosistema digital que optaron por fusionarse con entidades tradicionales —como Ualá con Uilo o Banco Macro con Itaú— Mercado Pago eligió un camino más complejo pero estratégico: crear su propio banco desde cero. No cambiará su nombre ni comprará una entidad existente. La apuesta es total, y se alinea con la visión de independencia financiera que el grupo fundado por Marcos Galperin sostiene desde sus orígenes. ¿Qué podrá hacer Mercado Pago como banco? El nuevo estatus permitirá a la fintech operar sin necesidad de bancos patrocinadores como Citibank o BIND. Con la licencia bancaria, podrá ofrecer directamente plazos fijos, préstamos, CEDEARs y operar en dólares mediante canales regulados. Además, podrá utilizar los depósitos de sus usuarios para otorgar créditos, eliminando su dependencia de la emisión de deuda y mejorando la rentabilidad del negocio. Esta transformación se enmarca en un proceso de expansión financiera que Mercado Libre viene impulsando hace años: desde ofrecer cuentas con CBU hasta servicios de inversión, seguros y criptomonedas. El objetivo es integrar todos los servicios en un ecosistema digital robusto, bajo control propio y con impacto regional. Impacto directo en los usuarios Para los usuarios actuales de Mercado Pago, los beneficios no tardarán en llegar. Uno de los primeros anuncios será el lanzamiento de tarjetas de crédito sin costo de mantenimiento, apuntadas principalmente a sectores históricamente excluidos del sistema bancario tradicional. Entre ellos se cuentan beneficiarios de ANSES (alrededor de 8 millones de personas), trabajadores en relación de dependencia (9 millones) y monotributistas o autónomos (3 millones), que podrían acceder a servicios bancarios sin trabas burocráticas ni costos excesivos. Este modelo ya demostró su eficacia en Brasil, donde Nubank alcanzó más de 120 millones de usuarios. Mercado Pago buscará replicar esa fórmula en Argentina y el resto de América Latina, complementando su propuesta con descuentos, promociones y cuotas sin interés dentro del ecosistema Mercado Libre. Criptomonedas y el posible regreso del "Melidólar" Uno de los capítulos más innovadores de esta transformación es el avance de Mercado Pago en el terreno de las criptomonedas. La empresa ya había desarrollado junto a Ripio una stablecoin propia, el Melidólar, que funciona en Brasil y Chile respaldada parcialmente por bonos del Tesoro estadounidense. La infraestructura blockchain utilizada es Lachain, y Mercado Pago opera allí como nodo. Si el BCRA flexibiliza la Comunicación A7506 —que restringe a los bancos la oferta de criptoactivos—, el Melidólar podría relanzarse en Argentina como herramienta de ahorro y fidelización. La proyección de rendimiento es de un 5% anual, con bajo riesgo y alta liquidez. Plazos e implicancias El camino regulatorio no será simple. El Banco Central se ha mostrado reticente a habilitar nuevas licencias, pero precedentes recientes —como la rápida aprobación de la compra de HSBC por parte de Banco Galicia— indican que el proceso podría resolverse en menos de un año. Para el ecosistema financiero argentino, la entrada de Mercado Pago como banco marca un punto de inflexión. TAPA DEL DÍA seguirá de cerca cada paso de esta transformación histórica que podría abrir una nueva etapa de competencia, innovación y accesibilidad financiera. Opinión pública (razonada): El ingreso de Mercado Pago al sistema bancario puede generar un efecto dominó positivo en la modernización del sistema financiero argentino. En un país con niveles crónicos de exclusión financiera, el acceso masivo a servicios bancarios sin costos y sin fricciones burocráticas podría ser una de las transformaciones estructurales más profundas de los últimos años. Pero también implicará una mayor responsabilidad regulatoria sobre una empresa que, hasta ahora, jugaba con otras reglas. Leé más en www.tapadeldia.com.