Milei, la constante provocación: ¿tensión interna, desgaste electoral y desafío con aliados? TAPA DEL DÍA: La política argentina está atravesando un momento de gran incertidumbre, donde las tensiones internas de la coalición La Libertad Avanza (LLA) y la estrategia polarizante de Javier Milei empiezan a pasar factura. Las encuestas reflejan un claro impacto en la campaña, especialmente en las provincias donde las elecciones se acercan, mientras los aliados del Presidente empiezan a poner en duda la viabilidad de mantener un frente unido. A pesar de la calma económica que se logró tras la salida del cepo y el auxilio del FMI, el entorno político sigue siendo un campo de batalla. El luto por la muerte del papa Francisco no logró enfriar la tensión de la campaña, y la constante confrontación de Milei parece estar siendo castigada en las urnas. Los resultados de las encuestas, como en Santa Fe, podrían reflejar un cambio de rumbo importante para la coalición oficialista. Los aliados empiezan a poner en guardia. Los gobernadores y dirigentes del PRO observan con recelo la política del enfrentamiento continuo. En la Ciudad de Buenos Aires, la campaña de Adorni no logra despegar, y el tono provocador de Milei ha tenido poco impacto positivo. En un contexto electoral tan competitivo, la estrategia polarizante no ha generado el respaldo esperado en las encuestas. TAPA DEL DÍA: En la Casa Rosada, algunos funcionarios ya reconocen que el mensaje constante de provocación de Milei está empezando a erosionar el apoyo, tanto dentro de su coalición como en la sociedad. La falta de moderación, especialmente en situaciones de duelo nacional como la muerte del Papa, parece estar afectando la imagen de su figura, lo que podría tener consecuencias en las elecciones locales del 11 de mayo y las legislativas porteñas. El desgaste también se nota en las disputas internas. Los ministros y figuras clave del gobierno, como Luis Caputo, están ganando relevancia, mientras la guerra interna entre Karina Milei y Santiago Caputo se intensifica. Los juegos de poder dentro de La Libertad Avanza están marcando el ritmo de la campaña, lo que podría ser un obstáculo para consolidar un frente sólido. Por otro lado, la relación con el PRO se sigue tensando, y Mauricio Macri parece estar presionando más que nunca a los dirigentes de su partido para que definan si están dispuestos a alinearse con los valores del PRO o se alejan. La posibilidad de que algunos dirigentes, como Diego Santilli y Cristian Ritondo, se sumen a LLA está tomando forma, pero también hay un riesgo de fragmentación dentro de la coalición. TAPA DEL DÍA: El futuro de La Libertad Avanza está lleno de incertidumbre. A medida que las elecciones se acercan, el riesgo de una derrota electoral se vuelve más palpable. ¿Será suficiente la estrategia de polarización para asegurar la victoria, o será este estilo confrontativo el que finalmente haga tambalear al gobierno de Milei?