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El campo le exige a Milei la reactivación urgente del dragado del Río Salado: "No puede desentenderse"

En medio de la crisis hídrica, las entidades rurales de Buenos Aires piden la inmediata reactivación del Plan Maestro del Río Salado. La paralización de las obras pone en peligro la producción agropecuaria y amenaza con profundizar las inundaciones en una de las regiones más productivas del país.

  • 13/05/2025 • 08:32

El campo le exige a Milei la reactivación urgente del dragado del Río Salado: "No puede desentenderse"

TAPA DEL DÍA Las principales entidades rurales de la provincia de Buenos Aires pidieron la reactivación inmediata de las obras del Plan Maestro del Río Salado, una infraestructura clave para prevenir inundaciones y garantizar la producción agropecuaria. La paralización del tramo IV.2 amenaza con afectar al 30% de los alimentos que se producen en el país.

TAPA DEL DÍA En una carta enviada al Gobierno nacional, las entidades que conforman el Consejo Honorario Asesor del Río Salado —CONINAGRO, la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Federación Agraria Argentina (FAA) y CARBAP— expresaron su preocupación por el freno a la obra y su impacto económico y ambiental en la región bonaerense. La paralización de las tareas de dragado, que afecta el tramo entre 25 de Mayo y Lobos, podría generar inundaciones devastadoras en una de las zonas agrícolas más productivas del país.

“Exhortamos a la inmediata reactivación del tramo IV.2, que fue acertadamente calificado como prioritario hace menos de un año por la Subsecretaría de Recursos Hídricos, así como el compromiso para con la prosecución integral del Plan Maestro junto con la provincia de Buenos Aires”, afirmaron las entidades en un comunicado.

El tramo IV.2 fue neutralizado administrativamente en marzo, en el marco de un ajuste fiscal que paraliza las obras de infraestructura hidráulica. Según denuncian las organizaciones del campo, la paralización ya se venía percibiendo a fines de 2024, y su continuidad amenaza con dejar en el olvido un plan iniciado hace más de 20 años. La Cuenca del Río Salado atraviesa el centro y norte bonaerense, con una superficie de 170.000 km², y su falta de mantenimiento expone a la región a inundaciones que afectan la economía local y nacional.

Las entidades rurales enfatizaron que el Plan Maestro del Río Salado es una obra de carácter federal que no puede ser retenida por el ajuste fiscal. “El Estado nacional no puede postergar ni desentenderse del destino del Plan Maestro. Los avances de la obra impactarán favorablemente en las cuentas fiscales como beneficiario de la tasa de retorno de la inversión en obra pública”, señalaron.

La diputada bonaerense Silvina Vaccarezza también subió la presión en la Legislatura provincial, solicitando el tratamiento urgente de su proyecto para crear un Comité de Cuenca Hídrica del Río Salado. El organismo tendría como objetivo garantizar la continuidad de las obras y asegurar una administración eficiente del recurso.

El conflicto pone en evidencia una nueva tensión entre el Gobierno nacional y el sector agropecuario, que históricamente ha sido un aliado clave de la gestión de Javier Milei. A medida que se acerca el vencimiento del plazo de neutralización, la presión del campo se intensifica.

TAPA DEL DÍA El futuro del Plan Maestro del Río Salado es ahora una cuestión crucial para la competitividad y la seguridad hídrica de la provincia de Buenos Aires, un territorio clave para la producción de alimentos en Argentina.