Con 165 allanamientos simultáneos en 85 ciudades bonaerenses, se desbarató la mayor operación contra la pornografía infantil en la historia del país. Fueron rescatadas 10 víctimas directas y liberados 63 menores más. Las fuerzas hallaron armas, dispositivos electrónicos y redes de trata digital como "Porno Hermanos". La lucha contra el crimen organizado que atenta contra la niñez tuvo este jueves uno de sus episodios más trascendentes: se llevó a cabo la “Operación Protección de las Infancias V”, un megaoperativo sin precedentes en la Argentina que incluyó 165 allanamientos simultáneos en 85 ciudades de la provincia de Buenos Aires. El resultado: 10 niños víctimas de abuso sexual fueron rescatados, 63 menores fueron liberados de contextos vulnerables y 16 adultos quedaron detenidos, acusados de integrar redes de pedofilia y producción de pornografía infantil. La información fue confirmada por la Procuración General de la Suprema Corte bonaerense, que indicó que en total 137 personas fueron identificadas como sospechosas (126 hombres y 13 mujeres), con edades que van desde los 16 hasta los 81 años. Nueve de ellos trabajaban en contacto directo con infancias. Además, se incautaron armas de fuego, estupefacientes, 357 celulares, 214 computadoras, 350 dispositivos de almacenamiento y otros elementos de prueba. En un caso aberrante registrado en La Matanza, se detuvo a un hombre que producía material de abuso sexual infantil con una niña de apenas cinco años. En su entorno convivían otros dos menores de 10 años que también fueron rescatados. Durante la operación, se detectaron redes de intercambio de material ilícito, como un grupo de WhatsApp llamado “Porno Hermanos”, donde los involucrados ofrecían niños como mercancía. Uno de los mensajes encontrados decía: “Tengo alguien que me consigue un nene de 6. Me lo entregan por dos días para que haga lo que quiera”, con un valor ofrecido de “20 mil”, sin precisar si en pesos o dólares. Desde TAPA DEL DÍA, fuentes de la investigación señalaron que la estructura operativa incluyó el trabajo articulado de la Policía Bonaerense, la Policía Federal y la Policía de la Ciudad, con la coordinación del Departamento de Delitos Conexos a la Trata de Personas, Ciberpedofilia y Grooming, encabezado por Julio Conte-Grand. Siete fiscalías provinciales —Azul, Bahía Blanca, Berazategui, Dolores, Junín, Quilmes y La Matanza— operaron como nodos principales del despliegue logístico y judicial. La gravedad y escala del operativo fue tal que desde Procuración lo definieron como “el más grande jamás realizado en Argentina sobre esta problemática”. Las causas judiciales incluyen delitos de grooming, tenencia, distribución y producción de pornografía infantil, además de acoso sexual digital. La mayoría de los implicados mantenía contacto directo con menores o compartía su entorno doméstico con ellos. En noviembre de 2024 se había realizado la “Protección de las Infancias IV”, con 114 allanamientos y 70 víctimas rescatadas, lo que confirma una tendencia alarmante pero también una respuesta creciente del sistema judicial frente al crimen organizado que explota a los más indefensos. Este caso, documentado y seguido muy de cerca por TAPA DEL DÍA, constituye un llamado de atención urgente y profundo. La amenaza es real, está organizada y, muchas veces, opera en el silencio de entornos cotidianos. Pero también existe una estructura estatal que, cuando se moviliza con decisión, puede hacer temblar sus cimientos. Redacción del Diario Tapa Del Día